Los días 21 y 22 de noviembre participamos en el 25º Programa Diplomático Europeo, celebrado en Budapest en el marco de la presidencia húngara de la UE. Se trata de una reunión anual de unos 100 diplomáticos jóvenes de los Estados miembros de la UE y del SEAE, así como directores de institutos y academias de formación diplomática de la UE.
El evento destacó la urgencia de adoptar la IA en la formación diplomática , y reflexionó sobre las dinámicas discusiones con los diplomáticos emergentes y los directores de formación. A medida que la IA sigue evolucionando, es crucial que la próxima generación de diplomáticos no solo comprenda sus implicaciones, sino que participe activamente en ella como una herramienta que influirá directamente en sus carreras y en el panorama geopolítico. Nuestra presentación en Budapest se centró en los siguientes tres conjuntos de interacciones entre la IA y la diplomacia:
En primer lugar, la IA está transformando el entorno geopolítico en el que opera la diplomacia, ya que facilita la redistribución del poder económico y social, lo que conduce al surgimiento de nuevos centros de influencia. Países como China, Estados Unidos, los Estados del Golfo y Singapur se están convirtiendo en actores clave en el ámbito de la IA. En consecuencia, Europa debe reevaluar su posición en este panorama geoeconómico en rápida evolución y diseñar estrategias para su interacción con estas nuevas potencias de la IA.
En segundo lugar, la IA introduce nuevos temas en la agenda diplomática. Más allá de cuestiones tradicionales como la seguridad, el comercio y las preocupaciones medioambientales, los diplomáticos deben abordar ahora cuestiones relacionadas con la IA tanto a nivel regional como de las Naciones Unidas. Entre ellas, se incluyen la negociación del acceso a hardware de desarrollo de IA, la gestión del uso de los datos, la protección del conocimiento generado por la IA y el tratamiento de los riesgos a corto, medio y largo plazo que plantea la IA. Los programas de formación deben dotar a los diplomáticos jóvenes de las habilidades necesarias para abordar con eficacia esta agenda diplomática en rápida evolución en materia de IA.
En tercer lugar, la IA aporta herramientas innovadoras que transforman la forma en que se lleva a cabo la diplomacia. Durante los debates, la atención se centró en las aplicaciones prácticas de la IA , como la mejora de los informes diplomáticos, las negociaciones y el análisis de políticas. Los servicios diplomáticos deben desarrollar sistemas internos de IA para aprovechar los vastos repositorios de conocimientos que contienen los informes de las misiones en todo el mundo. La IA ofrece una solución práctica para activar esta riqueza de información y transformarla en conocimientos prácticos para abordar los desafíos contemporáneos. El conocimiento, más que los datos, es un activo estratégico para los ministerios de asuntos exteriores, y la IA puede ayudar a proteger y mejorar este activo para futuras iniciativas diplomáticas.
Si bien algunos sostienen que una dependencia excesiva de la IA podría socavar las habilidades diplomáticas tradicionales, es esencial considerarla una herramienta complementaria y no un reemplazo. El elemento humano en la diplomacia (empatía, comprensión cultural y habilidades de negociación) sigue siendo irremplazable. La IA debe verse como un facilitador que mejora estas capacidades, no como un sustituto.
En conclusión, la integración de la IA en la formación y la estrategia diplomáticas no es sólo una opción, sino una necesidad. A medida que la IA sigue transformando el panorama diplomático mundial, los diplomáticos de la UE deben estar a la vanguardia de esta transformación.
El llamado a la acción es claro: invertir en capacitación en IA y en planificación estratégica para prepararse para la transformación crítica de la IA que se avecina.
¡Agradecemos a nuestros anfitriones húngaros por un evento altamente agradable y profesional!
DiploFoundation Blog. Traducido al español